Es una realidad que el virus COVID-19 ha afectado a todos los ámbitos de nuestra vida, y por supuesto, a los modelos comerciales como los conocíamos. Lo que no ha conseguido es disminuir el impacto que tiene la Inteligencia Artificial en nuestro planeta. Al contrario, se ha hecho evidente que esta tecnología y sus algoritmos de auto aprendizaje están jugando un papel fundamental en la transformación de las empresas.
Muchas organizaciones ya han apostado por el desarrollo de chatbots para la comunicación empresarial, el soporte en atención al cliente y también para estrategias de ventas.

Lo que en su día parecía ser una palabra de moda (IA), se ha convertido en parte imprescindible de nuestra vida cotidiana haciéndonos la vida más fácil.
Las empresas más avispadas han comenzado a aprovechar este potencial y es el motivo por el que Amazon, Microsoft o Google han crecido exponencialmente. Han «tirado» de la IA para realizar pronósticos con los miles de millones de datos generados cada día y adaptarse rápidamente a las condiciones y necesidades cambiantes del mercado.
¿Cómo ha IA está revolucionando cualquier industria?
1. Chabots como la mejor opción de atención al cliente
A día de hoy ya son muchas las empresas que utilizan asistentes virtuales para la comunicación empresarial, principalmente para dar soporte a sus usuarios y mejorar sus estrategias de ventas. Estos amiguitos robóticos aumentan la interacción con los usuarios y nos ayudan a recoger datos que si sabemos usarlos, nos darán beneficios comerciales, reduciendo la intervención humana y ofreciendo servicio 24/7. Según nos desvela un estudio de Juniper Research, se prevé que las transacciones de comercio electrónico a través de asistentes virtuales aumenten hasta 112 mil millones de dólares para el año 2023.
Los llamaré… «IA Chips»: para mejorar el rendimiento de aplicaciones
Los chips con IA permiten que las aplicaciones puedan ejecutar algoritmos de inteligencia artificial para que las aplicaciones funcionen más rápido en las industrias de salud, banca, finanzas, juegos, etc.
Un ejemplo muy conocido es la implementación de la IA en la fábrica de automóviles BMW en Alemania, que utiliza esta tecnología para comprobar las piezas de un vehículo y realiza una inspección completa en milisegundos. Se prevé que estos IA Chips alcancen unos ingresos de más de 90.000 millones de dólares para el año 2025, una locura, ¿no?.
Evolución de la transacción de datos para la sostenibilidad de las empresas
Es una realidad que los datos son la moneda de más valor del mundo digital. La generación de datos crece a niveles inimaginables cada día. Es imprescindible para que las empresas sobrevivan al competitivo mundo empresarial realizar análisis avanzados de datos con algoritmos de inteligencia artificial para crear modelos comerciales dinámicos y adaptables a cualquier situación.
Las soluciones de datos que la IA nos ofrece impulsan a las empresas emergentes hacia el éxito, pudiendo identificar qué estrategia de marketing es más recomendable a seguir según el contexto y los intereses de los clientes.
Ciberseguridad
Los datos son cada vez más accesibles por lo que ha habido un aumento masivo de ciberataques. Las empresas invierten cada vez más en mejorar su estructura y estar más protegidas frente a estos ataques. Los algoritmos predictivos avanzados juegan un papel crucial facilitando esta protección reduciendo el tiempo de respuesta de amenazas.
Búsquedas basadas en voz
Uno de los ejemplos más rutinarios de nuestras vidas son las búsquedas basadas en voz. Los asistentes de voz como Siri, Google Assistant o Alexa han definido un punto de referencia para los usuarios que buscan cualquier cosa online. Cada vez más son personas las que cambian las búsquedas de texto por voz.
Conclusión
Las continuas innovaciones en el mercado de la inteligencia artificial están transformando las empresas al mejorar la eficiencia de su trabajo, la productividad y aumentar los beneficios.
Esto no ha hecho nada más que empezar y esta tecnología es de uso imprescindible para cualquier industria, incluso los sectores más tradicionales.